lunes, 24 de noviembre de 2014

El Dakar 2014: ¿Impacto visual o deterioro AMBIENTAL?




Vesna Marinkovic

Norberto Ovando, experto de la Comisión Mundial de Áreas Protegidas – WCPA – de la UICN-, señala que este tipo de competencias producen visibles daños físicos por la ruta donde pasan y que estos impactos resultan en erosión, pérdida de suelo, daño a costas y márgenes en los humedales y compactación del suelo.
“Respecto de la fauna silvestre y doméstica se registran muertes por atropellos, pérdida de juveniles en zonas de reproducción y anidamiento y efectos indirectos por disturbios al suelo, agua y vegetación”, refiere Ovando.

Agrega que: “Es el Estado, el que favorece eventos como el Dakar haciendo prevalecer el “beneficio” económico y anteponiendo la imagen del país a cualquier costo”.

Refiere, además, que organizaciones como la UNESCO, y científicos manifestaron su preocupación por el impacto de este tipo de competencias, a propósito del Rally Dakar 2012 que concluyó en enero de este año y recorrió la zona centro-sur de Perú, el norte de Argentina y algunos sectores del desierto de Atacama, en el norte de Chile, antes de finalizar en Santiago y que, en su nueva versión, se apresta a recorrer territorio boliviano.

Refiere la preocupación, en ese entonces, de la jefa del Patrimonio Mundial para América Latina y el Caribe de la UNESCO, Nuria Sanz, quien se habría mostrado preocupada por “los impactos muy negativos que pueda sufrir todo el potencial maravilloso de los ecosistemas y territorios arqueológicos intactos en Perú, Chile, Argentina y otros sitios”, por donde pasó la competencia.

También menciona la preocupación al respecto del director del Museo Paleontológico de Lima, Meyer Hönninger, afirmando que con esta competencia “Están dejando ese desierto hecho una desgracia”, en relación al Rally 2012 que se habría realizado con fines publicitarios marcadamente visibles y a campo traviesa.

“Los gobiernos deberían requerir la realización de estudios de impacto ambiental serios, realizados por las Universidades Nacionales correspondientes, las ONGs y profesionales especializados reconocidos científicamente. Esto evitaría pérdidas irreparables como las que ocasiona este Rally”, recomienda finalmente Ovando.

LA RUTA BOLIVIANA
El Rally Dakar tiene previsto bordear el salar de Uyuni, a 3670 metros sobre el nivel del mar, el próximo 12 de enero del próximo año. El Gobierno ha señalado que ya se ha comenzado a trabajar con los municipios de Villazón, Tupiza, Atocha y Uyuni que se beneficiaran con algunas obras destinadas a mejorar servicios básicos de agua potable y energía eléctrica.

La ruta boliviana también implicaría las localidades de San Pablo de Lipes, Colcha-K, Wawa, Ika, San Pedro de Quemes y San Agustín, de acuerdo a la Amaury Sport Organisation (ASO), encargada de esta competencia.

Según el Gobierno, las obras de mejora e infraestructura tendrán el desembolso de Bs 70 millones, a cuenta del Estado y los municipios ubicados en la ruta del Rally Dakar 2014 cuya cobertura estaría alrededor de los $us 359 millones.


Durante el acto de lanzamiento de esta competencia en Bolivia, el presidente del Estado, Evo Morales sostuvo que: “Los recursos que se invertirán en el Dakar 2014 ya están garantizados. A través de la prueba Bolivia podrá mostrar al mundo la diversidad cultural y la belleza de sus paisajes”.

El ministro de cultura, a su turno expresó que: “A través del Dakar se aprovechará la riqueza turística del país. Las imágenes de la zonas que recorrerá la competencia se seguiran en directo por la televisión en 200 países”.

Etienne Lavigne, director del Dakar aseguró que: “Estoy contento de que la carrera pase por Bolivia, pues en cada versión tratamos de dar algo nuevo a los participantes. Estamos muy seguros de que el paisaje los impresionara”.

ESPECIES AMENAZADAS
Según un estudio reciente de la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz, en las zonas aledañas al salar de Uyuni, por donde prevé pasar el Rally, se registraron 93 especies de vertebrados, en el marco de un estudio que demandó 8 años. El ambientalista Cesín Curí explicó que se identificaron 25 especies de mamíferos (26%), cuatro de ellas consideradas amenazadas por el Chaetopharctus Nationi, Puma Concolor, Leopardus Jacobita y la Vicugna Vicugna.

Curí indicó también que en la zona se detectaron 61 especies de aves (66%) de las cuales 20 especies fueron acuáticas y 41 terrestres, incluyendo cinco especies amenazadas (e.g.,Rhea Pennata, Vultur Gryphus); 5 especies de reptiles(6%), y dos especies de anfibios.

Etienne Lavigne, aseguró que: “ Estoy contento de que la carrera pase por Bolivia, pues en cada versión tratamos de dar algo nuevo a los participantes”.
Entre medio, está la altiva llama que habita de manera natural en zonas altas que alcanzan hasta los 4 mil metros de altura sobre el nivel del mar.
Los habitantes de las zonas circundantes al salar, la usan principalmente para el transporte silencioso de sal, en una ruta milenaria que se prepara para ser “sorprendida” por los participantes del Rally Dakar 2014 y, al mismo tiempo, deleitarlos por la majestuosidad de su paisaje.

El objetivo de impactar visualmente a los participantes de este tipo de competencias con nuevos y exóticos paisajes así como asegurarles adrenalina libre de toda preocupación por el medio ambiente, ha comenzado a pasar factura. Expertos señalan que los impactos de esta competencia pueden afectar seriamente la compactación del suelo, así como la flora y fauna silvestre y causar disturbios en el agua y la vegetación. En este marco, cuestionan que los gobiernos antepongan el beneficio económico a cualquier costo y recomiendan la pertinencia de realizar estudios ambientales previos a este tipo de competencias.

LOS CUIDADOS MEDIOAMBIENTALES PARA EL SALAR

El anuncio oficial de la competencia Rally Dakar 2014 que se lanzó el pasado mes de abril en Bolivia, no se ha referido a la asignatura medioambiental, ni a la protección del salar como recurso natural y sitio turístico, que hoy cobran renovada vigencia.

Tampoco ha mencionado los posibles riesgos que esta competencia puede significar para el clima y la meteorología; la calidad del aire, geomorfología, suelo; calidad del gua, riesgos naturales y, entre otros, los efecto del ruido, vibraciones y luminosidad, sobre la vegetación, flora, fauna, medio humano, medio construido, patrimonio cultural y paisaje.

El ambientalista Cesin Curi, a propósito de los cuidados ambientales que deben tomarse en la zona del salar de Uyuni, en el marco del proceso de industrialización de las sales litio, estableció hace algún tiempo, la urgencia de: i) proteger el salar como recurso natural (tanto en términos de paisaje como de su uso productivo); ii) la protección del sistema productivo e industrial; iii) la protección de los recurso hídricos subterráneos dentro y fuera del salar y; iv) la protección de la capacidad productiva de los suelos agrícolas circundantes al salar de Uyuni.



UNA RUTA PLAGADA DE LLAMAS
Las localidades de San Pablo de Lipes, Colchaca, Wawa, Ika, San Pedro de Quemes y San Agustín, por donde prevé pasar el Rally es una senda plagada de llamas. ¿Esta competencia será un peligro para su sobrevivencia?

¿PAISAJE VIOLADO?
¿El Dakar afectará la calidad del aire y del agua? ¿Los ruidos, vibraciones y luminosidad de los participantes dañara la vegetación, la fauna y la compatación de la tierra?

Análisis químico del ruido ambiental


Química analítica, Señales y ruido.

La química analítica es el estudio de la separación, identificación y cuantificación de los componentes químicos de materiales naturales y artificiales. El análisis cualitativo da una indicación de la identidad de las especies químicas en la muestra y el análisis cuantitativo determina la cantidad de uno o más de estos componentes. La separación de los componentes se realiza a menudo antes del análisis.
Los métodos de análisis se pueden separar en clásica e instrumental. Los métodos clásicos utilizan separaciones tales como precipitación, extracción y destilación y el análisis cualitativo por el color, olor, o punto de fusión. El análisis cuantitativo se logra mediante la medición de peso o volumen. Métodos instrumentales utilizan un aparato para medir cantidades físicas del analito como absorción de la luz, la fluorescencia o la conductividad. La separación de los materiales se lleva a cabo usando cromatografía, electroforesis o métodos de fraccionamiento de flujo de campo.
Química analítica también se centra en mejoras en el diseño experimental, la quimiometría y la creación de nuevas herramientas de medición para proporcionar una mejor información química. Química analítica tiene aplicaciones en medicina forense, bioanálisis, análisis clínicos, análisis ambiental y análisis de materiales.

Señales y ruido

Uno de los componentes más importantes de la química analítica es maximizar la señal deseada y reducir al mínimo el ruido asociado. La figura de mérito analítica se conoce como la relación señal a ruido.

El ruido puede surgir de los factores ambientales, así como de los procesos físicos fundamentales.

El ruido térmico

Resultados de ruido térmico del movimiento de los portadores de carga en un circuito eléctrico generado por el movimiento térmico. El ruido térmico es ruido blanco significado que la densidad espectral de potencia es constante en todo el espectro de frecuencias.

El valor cuadrático medio del ruido térmico en una resistencia viene dada por
donde kB es la constante de Boltzmann, T es la temperatura, R es la resistencia, y es el ancho de banda de la frecuencia.

El ruido de disparo

El ruido de disparo es un tipo de ruido electrónico que se produce cuando el número finito de partículas es lo suficientemente pequeño para dar lugar a fluctuaciones estadísticas en una señal.

El ruido de disparo es un proceso de Poisson y los portadores de carga que componen la corriente sigue una distribución de Poisson. El ruido de disparo es ruido blanco.

El ruido de parpadeo

Ruido Flicker es el ruido electrónico con un espectro 1/frecuencia, como f aumenta, el ruido disminuye. Ruido de parpadeo surge de una variedad de fuentes, tales como impurezas en un canal conductor, y la generación de ruido de recombinación en un transistor debido a la corriente de base, y así sucesivamente. Este ruido se puede evitar mediante la modulación de la señal en una frecuencia más alta, por ejemplo a través del uso de un amplificador lock-in.

El ruido ambiental

El ruido ambiental surge de los alrededores del instrumento analítico. Las fuentes de ruido electromagnético son las líneas eléctricas, estaciones de radio y televisión, dispositivos inalámbricos, lámparas fluorescentes compactas y motores eléctricos. Muchas de estas fuentes de ruido son el ancho de banda estrecha, por lo que se pueden evitar. La temperatura y aislamiento de vibraciones pueden resultar necesarias para algunos instrumentos.


Reducción de ruido

La reducción de ruido se puede lograr ya sea en hardware o software. Los ejemplos de reducción de ruido de hardware son el uso de un cable apantallado, filtrado analógico, y la modulación de la señal. Ejemplos de software de reducción de ruido son el filtrado digital, conjunto promedio, promedio furgón, y los métodos de correlación. 

jueves, 13 de noviembre de 2014

El ruido ambiental y su efecto en los insectos

La hermosa planta insecto 01 - Vector



Los bosques vulnerables emiten ruidos que atraen a los insectos



Internacional
 | Más de un centenar de pinos infestados sin una explicación. Era esta la situación del rancho que el físico James Crutchfield tenía en Santa Fe (Nuevo México, EEUU) cuando se encontró por primera vez con el músico David Dunn, hace 16 años. Coincidieron en Austria en un festival de música experimental, la pasión de Crutchfield y a la vez el trabajo de Dunn. Al escuchar la historia, el músico, que también trabajaba en Santa Fe, se ofreció para grabar los sonidos ambientales del rancho. De hecho, su especialidad era convertir en música los ruidos de la naturaleza. Con un ingenioso bricolaje, Dunn fabricó un sensor de ruidos y, al clavarlo en uno de los árboles, se le desveló una auténtica sinfonía. Los árboles estaban deshidratados: se podía detectar el sonido de las células que estallaban y generaban la caída de columnas de líquido. Y este estado debilitado había atraí- do una miríada de escarabajos que ronroneaban dentro de la corteza.


Esta es, más o menos, la historia del primer disco interpretado por escarabajos. Los editores, Crutchfield y Dunn, estuvieron en Barcelona con motivo del congreso En ressonància, organizado por el KRTU (Departament de Cultura de la Generalitat) y la Fundació Caixa Catalunya. "La grabación despertó la curiosidad de muchos científicos --dice Crutchfield--. Hasta entonces se pensaba que los insectos percibían el mundo básicamente por señales químicas, pero la rica textura sonora que desvelamos dio alas a la hipótesis de que también el sonido desempeña un papel". Los escarabajos podrían haber evolucionado hasta captar los sonidos emitidos por árboles deshidratados, luego más vulnerables. 


MECANISMO DE AUDICIÓN

El problema de la hipótesis es que no se sabe nada sobre el mecanismo de audición de los insectos. Por ello, los dos investigadores están colaborando con un grupo de Canadá para averiguar si el sistema nervioso de los escarabajos responde a los sonidos. Pero aunque la bioacústica de los insectos siga siendo un misterio, el trabajo de Crutchfield y Dunn tiene un mérito indiscutible: haber desarrollado un sistema de detección temprana de la plaga. Y los resultados de esta línea de investigación van más allá. El pasado abril, un grupo de investigadores de Canadá reveló en la revista Nature que la invasión de los escarabajos está siendo amplificada por el cambio climático. Las infestaciones de Ips confusus (su nombre científico) son normales. "De hecho, el olor típico de los bosques de pinos viene de la resina que los árboles producen para defenderse de los insectos", comenta Dunn. 



CÍRCULO VICIOSO


Sin embargo, las sequías hacen los árboles más vulnerables, mientras que los inviernos más suaves reducen el número de escarabajos exterminados por el frío. Por esto, porciones de bosque cada vez mayores acaban infestadas y pierden su capacidad de absorber CO2. Y cuando se pudren, incluso se convierten en fuentes de gas invernadero, alimentando aún más el calentamiento. Crutchfield y Dunn llaman a este círculo vicioso el cambio climático entomogénico, es decir, inducido por insectos. "El problema podría afectar a otras especies --comenta Crutchfield--. Imágenes de satélite han revelado invasiones de polillas en bosques siberianos".

Quizá la salvación también provenga de la música. Crutchfield y Dunn están desarrollando en colaboración con otros investigadores unas barreras acústicas para bloquear o desviar la expansión de los insectos. De momento se limitan a exponer a sonidos secciones de corteza infestadas que han llevado al laboratorio. Pero esperan que pronto puedan producir una solución viable en campo abierto. 

lunes, 3 de noviembre de 2014

El ruido ambiental y su efecto en la educación


Un trabajo de la Mutualidad Argentina de Hipoacúsicos alerta  sobre  el tema. El nivel sonoro supera notablemente lo que se aconseja según estándares internacionales Pocas escuelas están  construidas y equipadas para garantizar el aislamiento acústico Chicos desatentos, que pierden rápidamente  el  interés  y  se dispersan. Docentes agotados, con gargantas que  al  fin  del día  parecen  haberse  deslizado  sobre  un  áspero campo  de  batalla. El culpable de este escenario tan  ingrato no  es  otro  que  el  ruido, un reconocido factor de stress que irrita, aumenta la inseguridad y disminuye la concentración y, en el ámbito  del  aula,  impacta  negativamente  sobre  el aprendizaje y el rendimiento escolar. Un estudio de la Mutualidad Argentina de Hipoacúsicos (MAH) realizado en  2000 sobre ruido de fondo de aulas en escuelas primarias de  Capital Federal  y  Gran Buenos Aires  determinó  que sus  niveles  son  notablemente superiores a los recomendados  internacionalmente. "Por esta razón - explica el ingeniero Horacio Cristiani, director de la MAH-. es que podemos considerar a estos alumnos en situación de  riesgo  educacional  por fallas en el canal de comunicación que establecen con  el  docente. Esto  impacta  tanto  en  el  aprendizaje como en la  salud. Para  que la información verbal llegue a los alumnos en forma clara y completa la voz del docente debe superar al menos en 10 dB (decibeles, unidad logarítmica  en  que  se mide  el sonido) la relación entre la señal (voz del maestro o maestra) y el  ruido.  "El  problema -señala Cristiani- es que el  ruido  de  fondo  es  de  alrededor  de  70 dB,  20 dB  más  que  el recomendado.  Entonces  el  docente, para   ser  escuchado,  tiene  que  elevar  la voz (casi a 80 dB), algo  difícil  de sostener  mucho  tiempo  porque  produce  una  gran fatiga vocal."  La licenciada Mabel L. de Boffi, fonoaudióloga y coordinadora de Investigación y Docencia de la MAH señala que la fatiga, sin embargo, no es sólo para los docentes. En las aulas, los alumnos se exponen todo el tiempo a un  ruido  de  fondo  y  a una voz que no demandan simplemente adaptación de su sistema auditivo (la adaptación es fisiológica y da tiempo a  la  recuperación  del  oído  luego de los estímulos). En aulas ruidosas, la estimulación que recibe el oído es intensa y continua, por eso la recuperación de ese noble sentido que nos conecta con el mundo circundante  es  más  lenta  y  produce  un  desgaste  neuronal. Es  decir, fatiga. Un  trío  peligroso ¿Cómo  se  compone  ese  ruido de fondo que amenaza el rendimiento y la salud en el aula? "Debemos considerar  tres  efectos  que  inciden  en  la  inteligibilidad del mensaje que el docente desea transmitir -añade el ingeniero Cristiani-. Por un lado, la distancia entre el alumno y el docente.



El siguiente factor es el ruido de fondo en el aula, que puede provenir de fuentes externas (calle, patios  internos  o externos) e  internas, generado   en  el  aula  por  los  mismos   alumnos, que  en  especial  cuando  son  pequeños  son especialmente ruidosos. El tercer factor que incide en el problema es la reverberación: el efecto producido por los rebotes de la onda sonora en paredes, piso, techo y todos los objetos del aula, que hace que el alumno no sólo reciba el mensaje hablado en forma directa, sino innumerables copias de ese mensaje, fruto de la reflexión sobre paredes y objetos del recinto. Este eco es sin duda muy atractivo en una sala de conciertos, pero no en un aula." Estrategias de solución El ingeniero Cristiani demuestra preocupación por el tema. "En este contexto en que vivimos -afirma-, donde a veces los chicos tienen la mitad  de  días  de  clase  de  lo que deberían, parece pretencioso hablar de este tipo de cosas, pero si encima  los  pocos días de clase los  tienen  en  condiciones  no  adecuadas, el resultado  final es mucho peor." El especialista  señala  que  el  fenómeno  estudiado  del alto  nivel de ruido en el aula se da especialmente en grandes  centros  urbanos y tanto  en escuelas  públicas  como  privadas, "aunque  notamos  que  en  las instituciones privadas que habían sido diseñadas  arquitectónicamente  con  el  objetivo  de ser escuelas había mejores resultados porque   tanto  el   diseño  como  los  materiales  utilizados  eran  apropiados. En  las  escuelas  públicas, en  cambio, especialmente  si  habían  sido  edificios destinados a otro fin y no se adaptaron o si se trataba de establecimientos muy antiguos, con techos muy  altos, que generan un alto nivel de reverberación, y materiales de buena calidad, pero no aptos el ruido era superior". 

¿Soluciones? "Es fundamental  elegir  materiales    absorbentes que disminuyen o impiden el eco -dice Cristiani- Son sustancias sintéticas que pueden aplicarse sobre el techo, el piso y las paredes que mejoren la aislación acústica. Las cortinas  son también una forma de disminuir el nivel  de  ruido  y  un  mejoramiento  de  la  aislación  de  puertas  y ventanas. Además, deberían  programarse  mejor  los  recreos  y los horarios para garantizar que nunca un aula esté expuesta a un patio mientras los alumnos están en clase." Finalmente, el ingeniero Cristiani señala que la contribución de la MAH es sólo un estudio piloto y a  pequeña  escala  para  llamar la atención sobre las condiciones acústicas del aula, algo que parece no haber motivado  demasiado  interés  hasta  ahora. "Ahora  sería  necesario el estudio de las condiciones acústicas  de  las  aulas  argentinas, que  nunca  se  hizo  a  gran  escala - agrega  el  experto-. Nuestros resultados  están  a  disposición  de  funcionarios  y  todo  aquel  interesado  en  la cuestión." El problema no es solo argentino, ya que la investigación local  se  basó  en  trabajos  realizados  en  los  Estados Unidos, que hallaron altos niveles de ruido en las aulas y motivaron  planes  de mejoramiento de las condiciones acústicas en unas 300 escuelas. "La idea es que las autoridades comprendan que  así  como  importan  ciertas  condiciones  sanitarias  básicas  en  un establecimiento  educativo, como  por ejemplo baños e instalaciones limpias, también se debería exigir que las aulas tengan las condiciones acústicas adecuadas para la actividad educativa."  



Condiciones mínimas "Así como importan ciertas condiciones sanitarias básicas en una escuela, por ejemplo baños e instalaciones limpias, también debería exigirse que las aulas estén acústicamente preparadas para la actividad educativa." Ing. Horacio Cristiani

domingo, 2 de noviembre de 2014

Los saltamontes suben el volumen de su 'canto' para cubrir el ruido del tránsito.

El exceso de ruido ambiental afecta al sonido característico de estos insectos y puede trastornar además su sistema de reproducción.

PARÍS- Célebres por su "canto", los saltamontes ajustan el volumen de su melodía para hacerse oír en medio del estruendo del tránsito, según un estudio publicado en la revista Functional Ecology, de la Sociedad Británica de Ecología.

Estudios anteriores había descubierto el impacto de un entorno ruidoso en los sonidos emitidos por los pájaros, las ballenas o las ranas, pero esta es la primera vez que unos científicos demuestran que el ruido causado por el hombre afecta a poblaciones de insectos, destaca la Sociedad Británica de Ecología en un comunicado.

Un equipo de biólogos de la Universidad de Bielefeld (Alemania), dirigido por Ulrike Lampe, capturó 188 especímenes machos de saltamontes "Chorthippus biguttulus", que tienen un canto metálico característico. La mitad fueron atrapados en lugares tranquilos y la mitad cerca de carreteras muy frecuentadas.

El "canto" de estos saltamontes, o estridulación, es en realidad el sonido producido al frotar las patas posteriores con las alas delanteras. Su significación es ante todo sexual, los machos atraen así a las hembras.

Los científicos han estudiado en laboratorio las diferencias entre los cantos de dos grupos de insectos, incitados a cantar en presencia de una hembra. El análisis de cerca de mil grabaciones de cantos nupciales ha revelado que los saltamontes que viven al borde de carreteras ruidosas producen sonidos diferentes a los de sus congéneres acostumbrados a la calma.

"Hemos constatado que en los hábitats ruidosos, los saltamontes aumentaban el volumen de la parte de baja frecuencia de su canto, algo lógico ya que el ruido de la circulación puede ocultar las señales en esta parte del espectro" sonoro, explicó Ulrike Lampe.

Según los científicos, estos resultados son importantes porque el ruido del tráfico podría trastornar el sistema de reproducción de los saltamontes. "Podría impedir que las hembras oigan correctamente los cantos nupciales de los machos, impedirle reconocer a los machos de su especie, o entorpecer su capacidad de evaluar el atractivo del macho según su canto", indicó la bióloga.

El saltamontes "Chorthippus biguttulus" es una especie común en Europa central. De 1,5 a 2 cm de longitud, su color es variable, de verde y marrón a rojo y violeta.

sábado, 25 de octubre de 2014

¿El ruido ambiental afecta a la productividad laboral?

Diversos estudios revelan que sonidos generados por audífonos, volumen alto de pantallas o sonido ambiental; timbres del teléfono y alarmas, así como gritos entre empleados y la estridencia del exterior provocan una pérdida de hasta 33% de la eficiencia.

“El personal pierde la concentración, padece estrés, cae en conflictos o problemas de actitud, incumple sus metas y es vulnerable a enfermedades como hipoacusia sensorial o disminución del nivel de audición, dolor de cabeza y cansancio”, asegura Jonathan Salomón, director general y especialista en audición de Comaudi.

El especialista explica que las personas que trabajan en oficinas están expuestas a ruidos que alcanzan entre 60 y 80 decibeles, cuando éstos no deben rebasar entre 10 y 30 decibeles.

Por ejemplo, apunta, basta con saber que el claxon de un automóvil genera 100 decibeles y el uso de audífonos –para escuchar– suma entre 60 y 70 decibeles.

El problema, apuntó, es que sólo 30% de las empresas son conscientes de tal situación y la mayoría se da cuenta hasta que sus trabajadores se enferman, tienen alguna crisis por enfermedades preexistentes: diabetes, presión arterial, males gastrointestinales o estrés.

6 tipos para mejorar tu rendimiento laboral


Para revertir los daños laborales causados por el ruido y la pérdida de audición, se recomienda a las empresas y empleados:

1. Hacer un análisis del ambiente laboral. Infraestructura de la oficina, distribución del mobiliario y nivel de ruido que prevalece al interior de las áreas de trabajo.

2. Buscar la asesoría. Un despacho inmobiliario, ingenieros o especialistas en el tema te ayudarán a resolver cada uno de los puntos de riesgo auditivo, desde cambios en la distribución del mobiliario o instalación de materiales que absorban el sonido, hasta el reemplazo de alarmas, sistemas de aire acondicionado o equipos de sonido ambiente, que rebasen 30 ó 40 decibeles.

3. Crea manuales de convivencia entre los empleados. El objetivo es reducir los sonidos provocados por gritos, cambio no autorizado de mobiliario, apertura de ventanas, reproducción de música en la computadora y recomendaciones sobre el empleo correcto de audífonos.

4. Promueve un chequeo médico anual a los empleados. Permitirá identificar y evitar riesgos asociados a la pérdida auditiva, enfermedades crónico-degenerativas, estrés, depresión y, por lo tanto, la reducción de incapacidades, rotación de personal y pérdida de la productividad.

5. Crea programas de capacitación, promoción de actividades deportivas, de recreación y dinámicas que mejoren el ambiente en la oficina y la convivencia entre los trabajadores.

6. Acude al médico ante las siguientes alarmas: mala concentración o irritabilidad por ruido, problemas para escuchar a sus compañeros a menos de un metro de distancia, pérdida de contacto con otras personas por el uso de audífonos o equipos de música ambiental, aislamiento y necesidad de ver la cara a otras personas para entender lo que te dicen o hablan.

Jonatan Salomón, indica que 80% de los mexicanos, de 28 a 50 años de edad, ubicados en la Población Económicamente Activa (PEA), sufren algún tipo de pérdida auditiva que afecta su eficiencia laboral y el desarrollo personal. Y tú, ¿cómo cuidas tu salud auditiva y mejoras tu productividad laboral?

jueves, 16 de octubre de 2014

Ruido ambiental desde el punto de vista físico. Última parte.

Las encuestas y estudio psico-sociológicos realizadas en los países de la C.E.E. han permitido 
establecer las reacciones de la población frente al ruido y cuantificar las molestias soportadas. 

En España no se dispone en la actualidad de un estudio fiable en este campo. Como resultado
de estos estudios aparece que entre los indicadores más utilizados, el LAeq extendido a
períodos largos de tiempo es el indicador más pertinente y el mejor correlacionado con las
respuestas de la población al ruido originado por el tráfico de carretera. El LAeq permite evaluar
bien la molestia de la población en general, pero sin embargo no explica bien las grandes
variaciones existentes en las respuestas individuales. Estas molestias individuales están
ligadas a factores sociales y culturales difíciles de evaluar. Se relacionan con fenómenos como
la valoración individual del descanso, el rechazo a ciertos tipos de ruido, las expectativas de
calidad de vida, etc.

 Estas circunstancias no invalidan la utilización del LAeq como indicador universal de ruido, pero
si ponen de manifiesto la necesidad en algunos casos de completar la evaluación con otro tipo
de índices sectoriales.

Hasta la actualidad, el indicador comúnmente utilizado en España es el nivel sonoro continuo
equivalente LAeq referido a un periodo diurno y a un periodo nocturno. La determinación de los
periodos nocturnos varía según los municipios y el sector regulado. En cuanto a los límites
máximos que se determinan para cada indicador, existe un denominador común en casi todos
los casos, consistente en establecer distintos criterios en función de los usos del suelo. De un
modo general se establecen límites más restrictivos para usos docentes y hospitalarios, que
para uso residencial en general. Existen límites más altos para uso industrial que para uso
residencial, y así sucesivamente.

El uso del LAeq como indicador de las molestias de ruido generado en el entorno de los
aeropuertos se está generalizando en todos los países desarrollados. Esta tendencia tiene su
origen en el proceso integrador de control del ruido existente en la actualidad, en el que se
consideran de forma conjunta todas las posibles fuentes de ruido. Dado que existe desde hace
algunos años una gran unanimidad en cuanto al uso del LAeq como indicador del ruido en los
campos de exposición ocupacional, ruido de los transportes terrestres, ruido en ambientes
exteriores, etc., su utilización para el ruido de los aviones permite establecer comparaciones y
agregar fácilmente los niveles procedentes de distintas fuentes. Esta cualidad del LAeq , debida a su carácter de indicador energético, no la tienen otros índices específicos utilizados
históricamente para la descripción del impacto acústico del tráfico aéreo.

A pesar de las limitaciones, citadas anteriormente, que poseen los índices expresados en
niveles continuos equivalentes, la mayoría de las administraciones europeas tienden a utilizar
el LAeq (o índices derivados de éste) como indicadores universales, debido fundamentalmente a
las siguientes ventajas que ofrecen:

1. Es un índice relativamente sencillo de comprender, en comparación con otros
índices.

2. Es un índice que mide un concepto acústico muy claro: la energía media durante un
determinado periodo de tiempo

3. Es un índice que permite establecer comparaciones y agregar niveles procedentes
de diversas fuentes

4. Es el índice más utilizado en las evaluaciones de impacto ambiental

5. Las directivas europeas y las normas CEN utilizan el LAeq

6. Es un índice que permite considerar diferentes periodos de tiempo para la
evaluación del impacto

7. Es un índice que permite comparar los niveles originados por una determinada
fuente con los niveles de fondo ambientales existentes en una determinada zona

8. Es un índice que se puede obtener directamente de los instrumentos de medida.
Estas son fundamentalmente las razones que han llevado a la adopción del LAeq como
indicador del ruido general en las legislaciones nacionales de algunos países con gran
desarrollo en materia de lucha contra el ruido. 

La distribución temporal: los períodos día, noche y tarde-noche. El Lden

La evaluación de la calidad del medio ambiente sonoro está determinada entre otros factores
por la actividad, e incluso por la actitud, de los receptores del ruido. Un ruido soportable e unas
determinadas circunstancias, no lo es en otras, lo que significa que un indicador de carácter
general (por ejemplo el LAeq diario) difícilmente puede explicar todas las situaciones.

En general en una sociedad urbanizada las actividades humanas están ligadas al espacio y al
tiempo. Por lo que se refiere al espacio, las acciones de control del ruido se pueden realizar
mediante el establecimiento de distintos límites admisibles del valor del LAeq según los usos del
suelo (residencial, industrial, hospitalario, ocio, etc.). Sin embargo, por lo que se refiere a la
distribución temporal del ruido (conviene recordar que el LAeq se refiere a un determinado
período de tiempo), los estudios realizados han demostrado que las reacciones de la población
son muy diferentes según el período del día. En general, el ruido es más tolerado durante el
período de actividad diurna, menos en los períodos de descanso de tarde-noche, y mucho
menos en el período nocturno. Para poder tener en cuenta estas variaciones se utilizan, en vez
de un único indicador, varios indicadores, y se establecen limites admisibles para cada uno
ellos. La mayoría de las reglamentaciones de los países de nuestro entorno utilizan dos
índices: el LAeq (día) y el LAeq (noche).

El primer problema que se plantea es decidir cual es el período de noche y cuál es el período
de día. En el cuadro siguiente observamos como existe una gran diferencia entre los intervalos
de tiempo de referencia utilizados en los países de nuestro entorno en sus normativas de
protección del medio ambiente sonoro (en exteriores).

A pesar de la falta de estudios en profundidad, en los países del sur de Europa el período de
tarde-noche es un período de actividad de características distintas a los del norte y centro de Europa, y en todos los casos se trata de un período critico, en el que las quejas de la población
son muy numerosas. España en concreto representa un caso especial debido a la diferencia de
duración de actividad de este período.

A diferencia de los países del norte, la actividad en la calle se prolonga hasta bien entrada la
noche, lo que unido a costumbres derivadas de condicionantes climatológicos (ventanas de los
edificios abiertas) hace que los períodos de tiempo establecidos en otros países no sean
adecuados para el nuestro.

Para poder tener en cuenta estas diferentes exigencias de calidad ambiental sonora en función
de los diferentes periodos de actividad se pueden utilizar índices integrados sobre 24 horas.

- Nivel sonoro día-tarde-noche

Ldia= nivel sonoro medio a largo plazo ponderado a definitivo en la norma ISO 1996 2:
1987, determinado a lo largo de todos los periodos diurnos del año.

Ltarde= nivel sonoro medio a largo plazo ponderado a definitivo en la norma ISO 1996 2:
1987, determinado a lo largo de todos los periodos vespertinos del año.

Lnoche t= nivel sonoro medio a largo plazo ponderado a definitivo en la norma ISO 1996 2:
1987, determinado a lo largo de todos los periodos nocturnos de un año.

En principio, el día dura 12 horas, la tarde 4 horas y la noche, 8 horas. Siguiendo las
recomendaciones de la normativa común europea, los periodos de tiempo básicos
para la evaluación y control del ruido ambiental los periodos de referencia son:

diurno desde las 7h a las 19 h., tarde desde las 17h a las 23 h. y nocturno desde las
23h a las 7 h, aunque una gran parte de las ordenanzas municipales en vigor y
normativas autonómicas consideran como periodo diurno desde las 8 h a las 22 h y nocturno de las 22 h a las 8 h

lunes, 6 de octubre de 2014

Ruido ambiental desde el punto de vista físico. Quinta parte.

 Índices básicos 

- Nivel de presión sonora (nivel sonoro). L, SPL

Varía a lo largo del tiempo. Se expresa por LA cuando se mide en decibelios A, que es lo habitual en estudios medioambientales. Para un determinado periodo de tiempo T, se pueden determinar entre otros los valores LAmax , el máximo valor de nivel de presión sonora (SPL) alcanzado durante todo el intervalo de estudio, y LAmin , el mínimo valor. Representan el ruido de mayor y menor intensidad y no aportan información sobre su duración ni sobre la exposición total al ruido.

- Nivel de presión sonora continuo equivalente. LAeq(T) 

Expresa la media de la energía sonora percibida por un individuo en un intervalo de tiempo, es 
decir, representa el nivel de presión que habría sido producido por un ruido constante con la 
misma energía que el ruido realmente percibido, durante el mismo intervalo de tiempo. El nivel 
de presión sonora equivalente debe ir acompañado siempre de la indicación del período de 
tiempo al que se refiere. 

Índices de la serie estadística (niveles percentiles). LN

La variación del nivel de presión sonora en un período de tiempo dado puede registrarse, y 
descomponer el período de medida en intervalos constantes para cada uno de los cuales se 
obtienen sus correspondientes niveles de presión sonora. Si el período es lo suficientemente 
largo, para ciertas fuentes de ruido, la repartición de los niveles sigue una ley normal. 
Se definen los siguientes valores: 

Nivel L1 : nivel alcanzado o sobrepasado durante el 1% del tiempo en el período 
considerado. (Es un valor muy cercano al ruido máximo). 

Nivel L10 : nivel alcanzado o sobrepasado durante el 10% del tiempo. 

Nivel L50 : nivel que se sobrepasa el 50% del tiempo de medición. Es la mediana 
estadística. (Representa el ruido medio) 

Nivel L90 : nivel alcanzado o sobrepasado durante el 90% del tiempo. (A veces suele 
tomarse este valor como el ruido de fondo) 

Nivel LN : nivel alcanzado o sobrepasado durante el N% del tiempo 

Estos índices estadísticos, muy utilizados hasta hace cierto tiempo y empleados todavía en 
algunos países, presentan, sin embargo, algunos inconvenientes de importancia para su 
aplicación al ruido originado por el transporte 

- En la práctica es necesario disponer de un número de muestras importante. En el caso 
del tráfico de carreteras se precisan intensidades superiores a 500 v/h para que sean 
significativos. En el caso del tráfico ferroviario, en general, no son representativos. 

- No informan más que de la probabilidad de alcanzar o sobrepasar un determinado 
nivel, en un lugar concreto, durante un N% del tiempo, y no responden a una 
formulación matemática precisa. 

- Nivel de exposición sonora (SEL) : se define como el nivel de presión sonora de un ruido 
continuo que tiene la misma energía en un segundo que la del ruido real durante el intervalo de 
tiempo T. Se utiliza para clasificar y comparar sucesos de ruido de diferente duración. 

El LAeq (t) como indicador del ruido ambiental

El nivel de presión sonora equivalente LAeq(T) es un índice relativamente complejo que plantea 
algunos problemas de comprensión por parte del público general. No corresponde, tal y como 
se cree a menudo, a una simple media aritmética de los niveles sonoros instantáneos. El LAeq
(T) realiza la suma de la energía acústica recibida durante el intervalo de tiempo. Es frecuente 
comprobar como se habla de niveles de ruido sin indicar si se trata de niveles máximos o 
equivalentes y sin especificar el período de tiempo a que está referido, lo que resulta no 
solamente incorrecto, sino que puede inducir a graves errores a la hora de comparar 
situaciones o sucesos sonoros diferentes. 
Por ejemplo, supongamos que cuando un vehículo ligero pasa por la calle de un centro urbano, 
el Lmax alcanzado al paso del vehículo durante un segundo a una cierta distancia del mismo es 
de 80 dB(A). Si no existe ningún otro ruido durante una hora en esa calle, el LAeq (1 hora) será 
de aproximadamente 45 dB(A). Si en vez de pasar una sola vez durante la hora de estudio, el 
vehículo pasara dos veces, el Lmax alcanzado seguiría siendo 80 dB(A), mientras que el LAeq (1 
hora) será 48 dB(A). Si fueran 10 veces las que pasara el vehículo el Lmax continuaría siendo 
80 dB(A), y el LAeq habría aumentado hasta 55 dB(A). Como se puede apreciar en este ejemplo 
el Lmax no tiene en cuenta ni el número de veces en que el ruido alcanza ese valor ni el tiempo 
durante el cual ese valor es alcanzado. Por contra, el Leq tiene en cuenta el conjunto de los 
ruidos soportados durante un cierto período de tiempo, y además tiene en cuenta a la vez el 
nivel de ruido y duración. 

jueves, 2 de octubre de 2014

Ruido ambiental desde el punto de vista físico. Cuarta parte

REFLEXIÓN 
La presión sonora en un punto es debida no sólo a la radiación directa de la fuente, sino
también al sonido indirecto procedente de todas las reflexiones que se producen. Si la energía
reflejada es alta, estamos ante una superficie reflectante, acústicamente dura, que se comporta
de un modo similar a los espejos con la luz.
Para los estudios y cálculos de las reflexiones suele utilizarse la teoría geométrica basada en la
propagación del sonido en línea recta. De ahí el concepto utilizado de rayo sonoro por analogía
con el rayo luminoso. Dependiendo de las características del obstáculo donde se produce la
reflexión, el rayo sonoro puede reflejarse en una sola dirección o en varias direcciones, con lo
que el estudio de su comportamiento se hará más complejo. 

ABSORCIÓN
Cuando una onda sonora incide sobre una superficie, una pequeña parte de la energía se
disipa absorbida por la misma. La absorción de la superficie es una función que depende de
bastantes parámetros tales como rugosidad, porosidad, flexibilidad, y, en algunos casos, sus
propiedades resonantes.
La eficacia de una superficie o material absorbente se expresa como un número entre 0 y 1,
llamado coeficiente de absorción, α, de manera que 0 representa la no absorción, es decir,
reflexión perfecta y 1 corresponde a la absorción perfecta.
El coeficiente de absorción es una función que varía con la frecuencia de la onda sonora por lo
que es necesario conocer el espectro de ruido para juzgar el efecto que producirá el material
absorbente sobre el ruido.

AISLAMIENTO (Transmisión) 
Los obstáculos que encuentra una onda sonora en su propagación actúan como "barreras"
ante el sonido. La capacidad que presenta un material o un obstáculo para oponerse al paso de
la energía sonora a través del mismo (transmisión) se conoce como aislamiento. El mayor o
menor aislamiento depende fundamentalmente del espesor y la masa superficial del obstáculo.
La pérdida por transmisión (TL) es la relación entre la energía sonora incidente y la energía
sonora transmitida y se expresa en decibelios

DIFRACCIÓN 
Cuando una onda sonora encuentra un obstáculo que es pequeño en relación con la longitud
de onda λ, el frente de onda en los bordes del mismo cambia de dirección. Este fenómeno se
denomina difracción, y tiene como consecuencia que la denominada zona de sombra acústica
(zona protegida situada detrás de un obstáculo) es considerablemente menor que la zona de
sombra visual.








 El efecto "suelo"
Se denomina "efecto de suelo" o “efecto suelo” a las alteraciones producidas en la propagación
de un sonido por la presencia de un determinado tipo de suelo.
 Por una parte, el suelo actúa como un obstáculo sólido, reflejando una fracción de la energía
acústica y absorbiendo el resto. Por otra parte, existen en las proximidades del suelo (sus
efectos pueden sentirse hasta una altura de 10 metros) gradientes de temperatura y humedad,
variables a lo largo del tiempo, movimientos de tierra, vegetación, y diversos obstáculos
naturales que ralentizan la propagación del sonido, y provocan una absorción difícilmente
evaluable.
Esta situación hace que la ley de atenuación de los niveles sonoros con la distancia se vea
modificada por el efecto de suelo. A falta de modelos precisos, existen curvas experimentales
para la evaluación de éste en función de la distancia a la fuente y el tipo de suelo. 

 INDICES PARA LA EVALUACIÓN DEL RUIDO AMBIENTAL 

 Las molestias debidas al ruido 

El estudio del origen y propagación del sonido permite determinar las características principales
del ruido, entendido éste como un sonido no deseado. Sin embargo, el carácter de molestia
intrínseco a la definición de ruido, añade un componente de carácter no acústico, que necesita
de la contribución de la fisiología, la psicología, la sociología y otras disciplinas para ser
correctamente interpretado. Desde un punto de vista medioambiental, el estudio y control del
ruido tienen sentido en cuanto a su utilidad para alcanzar una determinada protección de la
calidad del ambiente sonoro. Los sonidos son analizados para conocer los niveles de inmisión
en determinadas áreas y situaciones, y conocer el grado de molestia sobre la población.
Existen situaciones en las que estas molestias son evidentes, ya que la exposición al ruido
puede provocar daños físicos evaluables. Sin embargo, en gran parte de los casos, el riesgo
para la salud no es tan fácil de cuantificar, interviniendo factores psicológicos y sociales que
suelen ser analizados desde un punto de vista estadístico.
El grado de molestia tiene un componente subjetivo que introduce una considerable
complejidad en el intento de establecer los criterios de calidad del ambiente sonoro. Conviene
recordar aquí que el concepto de subjetividad no está reñido con un análisis científico de los
problemas, y existirán indicadores de ruido que estén mejor o peor correlacionados con el
grado de molestia.

Para poder abordar el problema del ruido, es necesario, por lo tanto, el establecimiento de un
indicador que “explique” adecuadamente este grado de molestia. Entre el gran número de
parámetros e índices desarrollados en el campo de la acústica para el estudio de los sonidos
es preciso seleccionar un indicador de molestias (a ser posible un índice numérico) que sirva
de base para la evaluación del impacto y para el establecimiento de valores límite de inmisión
que garanticen una determinada calidad del ambiente sonoro. Por otra parte, para ser
operativo, este índice debe ser fácil de obtener y de interpretar.
Las molestias debidas al ruido dependen de numerosos factores. El índice que se seleccione
debe ser capaz de contemplar las variaciones o diferentes situaciones de los siguientes
aspectos, entre otros:

a) La energía sonora: Las molestias que produce un sonido están directamente
relacionadas con la energía del mismo. A mas energía (sonido más fuerte) más
molestia. El índice básico relacionado con la energía sonora es el nivel de presión
sonora.

b) Tiempo de exposición: Para un mismo nivel de ruido, la molestia depende del
tiempo al que un determinado sujeto está expuesto a ese ruido. Podemos estar
contemplando periodos de segundos, minutos, horas o incluso una vida laboral
entera. En general, un mayor tiempo de exposición supone un mayor grado de
molestia.

c) Características del sonido: Para un mismo nivel de ruido y un mismo tiempo de
exposición, la molestia depende de las características del sonido: espectro de
frecuencias, ritmo, etc. La música es un sonido que en general resulta agradable

d) El receptor: No todas las personas consideran el mismo grado de molestia para el
mismo ruido. Dependiendo de factores físicos, distintas sensibilidades auditivas, y
en mayor medida de factores culturales, lo que para uno son ruidos muy molestos,
para otros pueden no serlo. Los factores culturales están relacionados con la
experiencia vital del sujeto y sus expectativas. Distintas sociedades reaccionan de
manera diferente frente a sonidos más o menos “familiares”. En las culturas
occidentales, las mayores diferencias se encuentran entre los habitantes de los
pequeños núcleos rurales y los de las grandes ciudades. Dentro de un mismo
sector de población, el factor edad parece ser también significativo.

 e) La actividad del receptor: Para un mismo sonido, dependiendo de la actividad del
receptor, éste puede ser considerado como un ruido o no. El caso más evidente es
el de los periodos de descanso. Un sonido que puede ser considerado como
agradable (un concierto de música) se convierte en un ruido molesto si el receptor
pretende dormir. Sonidos que durante la actividad laboral pasan desapercibidos, se
convierten en ruidos perfectamente reconocibles en periodos de descanso.
Algunas actividades o estados requieren ambientes sonoros más silenciosos
(lectura, enfermedades, conversaciones, etc.), percibiéndose como ruido cualquier
sonido que no esté relacionado con la actividad.

f) Las expectativas y la calidad de vida: Dentro de este epígrafe se engloban aquellos
aspectos subjetivos, difíciles de evaluar, que están relacionados con la calidad de
vida de las personas. Para ciertos grupos de personas, las exigencias de calidad
ambiental para el tiempo y los espacios dedicados al ocio son muy superiores a las
de otras situaciones. El caso más frecuente es el de las viviendas de segunda
residencia, en las que los ruidos se perciben en general como mucho más
molestos que en la vivienda principal, debido a las expectativas de descanso
depositadas en la segunda residencia. También sucede habitualmente que en
entornos de una gran calidad ambiental, se aceptan peor los ruidos que en
entornos medioambientalmente degradados.

martes, 23 de septiembre de 2014

Ruido ambiental desde el punto de visa físico. Tercera parte

Curvas de ponderación en frecuencia 


El oído humano no es sensible de la misma manera a las diferentes frecuencias. Así, para un 
mismo nivel de presión sonora, un ruido será tanto más molesto cuanto mayor proporción de 
altas frecuencias contenga. Basándose en las curvas de isosonoridad del oído humano se 
definieron una serie de filtros con la pretensión de ponderar la señal recogida por el micrófono 
de acuerdo con la sensibilidad del oído, es decir, atenuando las frecuencias bajas, para poder 
reflejar un nivel sonoro representativo de la sensación de ruido realmente recibida. 
Para tener en cuenta esta sensibilidad se introduce en la medida del ruido el concepto de filtros 
de ponderación. Estos filtros actúan de manera que los niveles de presión de cada banda de 
frecuencia son corregidos en función de la frecuencia según unas curvas de ponderación. Con 
este criterio se han definido varios filtros, siendo los más conocidos los denominados A, B, C y 
D. 
El filtro utilizado en el dominio del ruido del transporte es el A, y los niveles de presión sonora 
utilizados se miden en decibelios A, dBA

 LA PROPAGACION DEL SONIDO EN CAMPO LIBRE 

 Atenuación por la distancia. Fuentes sonoras puntuales y lineales. 
En el estudio de la propagación del sonido en campo libre, es decir, en ambientes exteriores, 
es preciso diferenciar dos tipos de fuentes sonoras 
En el caso de las fuentes sonoras puntuales, se considera que toda la potencia de emisión 
sonora está concentrada en un punto. Se suelen considerar como fuentes puntuales aquellas 
máquinas estáticas o actividades que se ubican en una zona relativamente restringida del 
territorio. Dependiendo del detalle del análisis las fuentes puntuales muy próximas pueden 
agruparse y considerarse como una única fuente. 

Para fuentes puntuales, la propagación del sonido en el aire se puede comparar a las ondas de 
un estanque. Las ondas se extienden uniformemente en todas direcciones, disminuyendo en 
amplitud según se alejan de la fuente. 
En el caso ideal que no existan objetos reflectantes u obstáculos en su camino, el sonido 
proveniente de una fuente puntual se propagará en el aire en forma de ondas esféricas según 
la relación 
A partir de esta relación, se puede deducir que para un medio homogéneo, cada vez que 
doblamos la distancia, el nivel de presión sonora disminuye 6dB. 
Si el sonido proviene de una fuente lineal, éste se propagará en forma de ondas cilíndricas, 
obteniéndose una diferente relación de variación de la energía en función de la distancia. Una 
infraestructura de transporte (carretera o vía ferroviaria), considerada desde el punto de vista 
acústico, puede asimilarse a una fuente lineal. Este artificio es una simplificación del problema, 
y solamente es válida si se razona en niveles de presión sonora equivalente integrados sobre 
un tiempo superior a la duración del paso de un vehículo. En los estudios de ruido del 
transporte se trabaja normalmente en estas condiciones. 

Atenuación por absorción del aire 

La atenuación de las ondas sonoras en la atmósfera real no sigue exactamente las leyes de la 
divergencia geométrica, ya que el aire no es un gas de densidad homogénea, ni está en 
absoluto reposo. Existe, en consecuencia, una atenuación suplementaria debida a la absorción 
por el aire de parte de la energía acústica que la transforma en calor. 
Esta atenuación depende de la frecuencia del sonido, de la temperatura y de la humedad del 
aire. Cuanto mayor es la frecuencia, mayor es la atenuación experimentada. 
Los valores de atenuación del ruido por absorción del aire se obtienen experimentalmente para 
unas ciertas condiciones de temperatura y humedad. En los casos habituales varían de 0,3 
dB(A) a 1 dB(A) por cada 100 de recorrido en el aire, medidos según las diferentes frecuencias. 

Influencia de la temperatura y del viento en la propagación 

Las variaciones de temperatura tienen una neta influencia sobre la densidad del aire, y por lo 
tanto, sobre la velocidad de propagación de las ondas sonoras (c = f(densidad)). 
La temperatura del aire puede decrecer con la altitud (caso más usual), o bien, crecer con ella 
(inversión térmica). Si la temperatura decrece con la altura, los rayos sonoros se curvan con 
pendiente creciente, provocando una zona de sombra alrededor de la fuente. Sin embargo, en 
el caso de inversión térmica, los rayos se curvan hacia el suelo, eliminando la zona de sombra. 
Esta situación de inversión térmica puede provocar un aumento de 5 a 6 dB(A) con relación a la 
situación normal. 

La influencia del viento puede motivar, así mismo, variaciones del orden de 5 dB(A) entre las 
distintas situaciones. En presencia del viento, el sonido, en lugar de propagarse en línea recta, 
se propaga según líneas curvas. 
En el sentido del viento, el sonido se propaga mejor, y los rayos sonoros se curvan hacia el 
suelo. Contra el viento, el sonido se propaga peor que en ausencia del mismo, y los rayos 
sonoros se curvan hacia lo alto, formándose, a partir de una cierta distancia de la fuente 
(normalmente superior a los 200 metros), una zona de sombra. 
La atenuación debida al viento es un fenómeno muy complejo difícil de modelizar, y en los 
casos en que existan en un lugar vientos dominantes característicos es aconsejable realizar 
mediciones directas para la estimación de su efecto sobre la propagación del ruido

El efecto de los obstáculos 

Si no existen obstáculos, el sonido emitido por una fuente se propaga en campo libre por el aire 
hasta alcanzar al receptor sin más atenuación que la debida a la distancia entre ambos y a la 
absorción del aire. 
Si se interpone un obstáculo entre la fuente y el receptor, la propagación del sonido resulta 
modificada. Cuando una onda sonora encuentra un obstáculo sólido, una parte de la energía es 
reflejada por el obstáculo, otra parte es absorbida por el mismo, penetrando en su interior y 
transformándose en vibraciones mecánicas que pueden eventualmente radiar nuevas ondas 
acústicas, y, finalmente, el resto de la energía "bordea" el obstáculo, produciéndose una 
perturbación del campo acústico por efecto de la difracción.